Un año después de la aprobación de la medida de gobierno de impulso de la Economía Azul, Barcelona sigue trabajando en un proyecto de presente y futuro para convertirse en una ciudad más sostenible, equitativa y competitiva. La apuesta por la economía azul surge en un contexto de emergencia climática, con la voluntad de fortalecer un sector económico estratégico. Por eso, el Ayuntamiento de Barcelona ha contado con la colaboración de un ecosistema de más de 70 agentes para avanzar en la aplicación de la estrategia.

Para realizar balance del primer año de aprobación de la medida, el 29 de septiembre se ha celebrado un acto para presentar los retos alcanzados y concretar los objetivos en marcha. Durante los primeros 12 meses de implementación de la Estrategia de Economía Azul, se ha logrado un 81% de los objetivos fijados. Por ejemplo, desde Barcelona Activa se han puesto en marcha proyectos de apoyo al emprendimiento del sector a través del programa empresarial de soporte a la economía azul, donde se acelerarán 15 start-ups con nuevas oportunidades de negocio.

Entre los diferentes retos también destaca la captación de grandes eventos marítimos y deportivos en la ciudad, como la Copa América 2024 en Barcelona, ​​una de las competiciones deportivas más importantes del mundo. También se suma la atracción de más organizaciones internacionales en Barcelona, ​​como el World Ocean Council (WOC) y la Cumbre de Océanos Sostenibles (SOS), evento de referencia sobre océanos, economía y sostenibilidad.

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